En La Nación de hoy, se reproducen declaraciones del exministro de Hacienda, Rodrigo Chávez, denunciando que hay un faltante de 1,2 billones de colones para que Hacienda pueda "cerrar" el año sin caer en una situación de "default" (de imposibilidad de pago por parte del Estado de sus obligaciones, lo que daría paso a una crisis sin precedentes).
No nos parece que se trate de alarmismo, para presionar al gobierno y los diputados a tomar las medidas para avanzar hacia un acuerdo con el FMI. La Nación también está planteando las dificultades que hay para refinanciar la deuda pública, y la semana pasada planteó una moratoria, con postergación de pagos y rebaja de intereses, a los tenedores de bonos de la deuda que podríamos llamar "sociales": la Caja, los fondos de pensiones complementarias (OPC) y JUPEMA. Rodrigo Chávez sigue vinculado a los organismos financieros internacionales, probablemente la información que maneja le viene por ahí y por eso hay que darle credibilidad.
Aunque los organismos financieros internacionales quieren apretarnos el pescuezo para encadenar el país al pago de la deuda, no es su política dejar que los países endeudados entren en situación de default, porque el día que se trate de uno grande, puede traerse abajo todo el castillo de naipes que se ha levantado en los mercados financieros internacionales con la especulación bursátil y crediticia.
La Nación señala que "Según sus números, el Gobierno Central necesita más de ¢1,8 billones para completar el plan de gastos de este año y, a final de octubre, Hacienda solo habría logrado acumular en el flujo de caja cerca de ¢600.000 millones." Los eurobonos que está ofreciendo el país a nivel internacional no han tenido colocación y han perdido 13 puntos, reflejando la "desconfianza" de los inversionistas en el país. El megacanje de deuda interna de colones a dólares por 1 400 millones de dólares, mecanismo para postergar el pago de los vencimientos en camino, también fracasó. No se llegó ni a medio millón de dólares. Ni qué añadir, que de los vencimientos por 1,3 billones de colones que pretendían postergar, sólo se logró negociar 53 000 millones de colones, un 4%.
Como para desvelar, pero el ministro de Hacienda, Elián Villegas, señala que Chávez maneja la información con retraso, que no está al día en los flujos de caja, y que pese a las dificultades que hay, la situación es manejable y se va a cerrar el año sin un default. El ministro estigmatiza de "agoreros" y "vendedores de miedo" a quienes vemos que el país se desliza hacia este punto. Al mismo tiempo que se niega a dar información actualizada a Chávez y a cualquiera que la solicite, "alegando que esa información es materia reservada por Hacienda dado su valor".
“Sí le puedo señalar, como lo he venido indicando públicamente que, en dólares, prácticamente lo tenemos cerrado - dice en La Nación. Por eso no tenemos ningún apetito en dólares. Nuestra situación de flujo de caja es satisfactoria, buena, que va de la mano de recaudación que, en este momento, está en un leve repunte debido a la reactivación económica que se viene dando y que el mercado interno ha respondido satisfactoriamente”.
Hay que persignarse. Si el faltante es de 1,2 billones, como dice Chávez, y se va a cubrir con el ingreso por concepto de impuestos, ¡ASÚSTENSE! No creemos que entre tanto en diciembre.
Pareciera que la movida para salvar la situación viene por el lado de la MORATORIA que planteó La Nación: postergar los vencimientos y rebajar los intereses a los bonos de la deuda pública que han adquirido los fondos de pensiones complementarias, el IVM y el régimen de pensiones del magisterio nacional (JUPEMA) para capitalizar y asegurar las pensiones.
En una nota anterior, señalábamos cómo La Nación hizo una operación fraudulenta con la información que les pasa Hacienda "en exclusiva", para presentar las cosas, como si no existiera deuda en manos de los grandes capitalistas del país. Contra ellos La Nación no plantea una moratoria, la plantea contra los fondos de carácter social, el ahorro del pueblo para tener pensión el día de mañana, y precisamente para seguirle pagando los intereses de la deuda pública a los grandes capitalistas. Esa parte de la deuda sí se seguiría pagando.
Postergar el pago de los vencimientos de los títulos del Estado en manos de los fondos sociales y al mismo tiempo bajarle las tasas de interés, al someterlos a la inflación, es en realidad OTRO IMPUESTO CONTRA EL PUEBLO TRABAJADOR.
Los trabajadores tenemos que movilizarnos para intervenir en las negociaciones que está entablando Hacienda con JUPEMA, LA CAJA Y LAS OPERADORAS DE PENSIONES COMPLEMENTARIAS. Una salida momentánea, a costilla de nuestros fondos, no va a garantizar que se evite el default para el año entrante (cuando se va a tratar de vencimientos por 10 000 millones de dólares), una verdadera bomba atómica. Cualquier acuerdo que se haga con Hacienda no debe ser en perjuicio de nuestros fondos, y debe estar supeditado a compromisos serios por parte del gobierno para meter en cintura a los grandes evasores fiscales. NO HAY OTRA SALIDA PARA EVITAR EL DEFAULT EN CURSO, SEA ESTE AÑO O EL PRÓXIMO. Es necesario también aplicar una moratoria y una auditoría de la parte de la deuda pública en manos de los grandes capitalistas. Los bonos que tienen en sus manos los adquirieron con plata que le robaron al fisco al no pagar sus impuestos correctamente. Es una parte de la deuda que hay que condonar (dejar de pagar).
Elián Villegas, sin embargo, quiere mantener en secreto quiénes tienen en sus manos los bonos de la deuda. Aplaudimos por eso la iniciativa de los compañeros Esperanza Tassies, Rocío Chamorro y César Gómez al interponer un recurso ante la Sala IV para que Hacienda y el BCCR hagan pública esta información.
La deuda amenaza con aplastar al país. Exigimos a las dirigencias del Magisterio Nacional, a JUPEMA, LA DIRECTIVA DE CAJA DE ANDE Y DE LA SOCIEDAD DE SEGUROS DE VIDA DEL MAGISTERIO NACIONAL que convoquen a las/los educadores con carácter de urgencia y de manera presencial, para discutir como defendemos nuestros fondos y luchamos contra el default al que lleva el país el juego de pirámide del gobierno en beneficio de los capitalistas que son acreedores del estado.
PARA EVITAR EL DEFAULT Y LA RUINA DEL PAÍS ¡ES NECESARIO METER EN CINTURA A LOS GRANDES EVASORES FISCALES Y ACABAR CON LAS EXONERACIONES A LAS GRANDES EMPRESAS CAPITALISTAS!